Un minuto antes de la oscuridad y con trampas.

un minuto antes de la oscuridad

Un minuto antes de la oscuridad.

Ismael Martínez Biurrun (Pamplona 1972)
Fantascy

   Antes de tomar este libro no conocía al autor, creo que él tampoco a mí por lo que estamos a mano. Para leer la novela hice trampas y le quité un poco de terror como cuento al final.  
   
   Figúrate que vives en la Edad media y existe el peligro de que ser invadido. Entonces rodearán la ciudad de muros, el problema es que tu casa y la de tus vecinos quedan fuera. Pero a este drama del pasado Ismael MB lo sitúa en un futuro inmediato en algo que hoy o pasado mañana puede suceder. 

   En esta Madrid distópica la familia de Ciro y Sole tratan de seguir con su ritmo habitual, al menos durante el día. Él sigue dando clases y ella en lo suyo. Son vidas tangenciales con escasos puntos de contacto. 

   A Ciro le entregan su clon, el clon será a su vez como un guardián en casa. Los personajes tienen que ver como lo tratan y como se relacionan con el recién llegado y el lector también; en este punto me vi contrariado aplicándole una y otra vez las leyes de la robótica para recordar, una y otra vez, cuánto me ha influido el Buen Doctor y también que un robot no es un clon y viceversa.

   Ciro es Ciro. Ciro descubre una trama criminal con sabor distópico... ¿para que contar más?. sólo diré que Ciro no es Poirot; lo bueno es que Martínez Biurrun no es Corin Tellado (Perdón Corin y sé que lo digo sin haberte leído). El suspenso, los giros de historias y escenarios tan bien logrados me han recordado al señor King. Tengo por seguro que leeré algo más de Ismael. 

   Hice trampas. El Madrid que conocí fue distópico, al día de hoy no he vuelto. Invierno, el cielo blanco como si fuera una hoja de papel. Un ovni estrellado en un jardín (me explican que publicita el regreso de "X files", no lo sé) En la Puerta del Sol: ni puerta ni sol; gente flotando de pie o sentada sostenida por bastones y con cara de trance. En el ayuntamiento Carmena, además un cartel "Refugees Welcome" y pensé: si estos tíos no distinguen refugiado de inmigrante es como si pidieran una invasión a gritos. En mi mano la novela "Un minuto antes de la oscuridad" de Ismael Martínez Biurrun. Créanme no soy cobarde pero ¿Quién no se intimida aunque sea un poquitín? 
   Leería Un minuto antes de la oscuridad en esos días, pero hice trampas y lo guardé en una capsula temporal. Ya sin Carmena en el Ayuntamiento y aprovechando que al tío que está ahora ni lo conozco comencé a leer la novela. ¡Esto de hacer trampas y quitarle algo de terror al asunto no funcionó!. Comencé a leer la novela con miedo, al terminar la cerré con terror.

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